Bronquitis
La bronquitis no es una afección específica, sino más bien un síntoma que afecta los bronquios de los pulmones. Hay dos vías respiratorias principales que se ramifican desde la tráquea hacia los pulmones y son responsables de producir moco que atrapa el polvo y la suciedad para evitar que salga más adelante. Algunas afecciones/infecciones respiratorias pueden causar que los bronquios se inflaman, se hinchan y aumentan la producción de moco, causando tos que puede ser causada por la exposición al humo, infecciones bacterianas o virales.
La bronquitis a menudo se desarrolla después de un resfrío y se presenta como un empeoramiento de los síntomas: o Tos con flema clara, amarilla, verde o con sangre o Fiebre, escalofríos, dolores corporales u opresión/dolor en el pecho, congestión, dificultad para respirar o sensación de letargo o sibilancias o silbidos al respirar. La bronquitis aguda generalmente dura algunas semanas y desaparece por sí sola, mientras que la bronquitis crónica es más grave y generalmente dura varias semanas y se necesitan antibióticos para la recuperación.
Bronquitis y la Sal
La hidratación de la mucosidad es importante para la eliminación de la mucosidad y la salud pulmonar en general. Un estudio reciente indicó una marcada mejoría en la hidratación del moco cuando se analizó el esputo inducido con una solución salina hipertónica nebulizada al 3% al 5% inhalada
Estudios demuestran que la hidratación del moco puede ser un biomarcador útil para la evaluación de la inflamación al diagnosticar bronquitis crónica y EPOC, ya que determina la eficiencia de la eliminación de la mucosidad en condiciones sanas o enfermas.